Abstracts - Nutrición

S. cerevisiae puede ser una buena alternativa a tener en cuenta para la prevención y el tratamiento de la diarrea causada por ETEC en lechones.

Los ácidos grasos saturados mejoran las propiedades tecnológicas de la grasa dorsal.

La xilanasa reduce las emisiones de gases y puede reducir los olores desagradables del purín.

La ingesta del calostro es determinante para la supervivencia y un buen crecimiento de los lechones.

El espesor de grasa dorsal en las cerdas gestantes afecta sobre el crecimiento de la descendencia y rendimiento del magro.

Los cerdos pueden ser alimentados con dietas que incluyen hasta 240 g/kg de harina de colza, junto con 150 g/kg de DDGS de trigo sin afectar los rendimientos productivos y la calida de la canal.

Los requerimientos de Lys para lechones alimentados con dietas sin antibióticos son más elevados que los recomendados por el NRC (1998).

Estos resultados demuestran que las opciones de manejo pueden afectar el rendimiento reproductivo y las lesiones de las cerdas gestantes alojadas en grupos con sistemas de alimentación ESF.

Aumentar la suplementación de DHC mediante biomasa de alga en las dietas para cerdas gestantes puede mejorar la vitalidad de los lechones.

Las modificaciones en la microbiota fecal de cerdas por E. faecium se transfieren a su descendencia hasta el destete.

Con el uso de subproductos en el engorde, el crecimiento compensatorio no tiene efecto sobre la calidad de la canal.

La leche artificial es una buena alternativa para los lechones supernumerarios.

El zinc con AA puede reducir los efectos negativos del estrés por calor sobre la integridad ileal.

La progenie de las cerdas alimentadas con una dieta alta en grasas tienen un mayor contenido total de ácidos grasos PUFA y n-6 en el músculo longissimus thoracis.

Se observó como los tratamientos dietéticos de ≥ 800 UI/kg mostraron efectos beneficiosos en las cerdas reproductoras en términos de contenido mineral óseo y de resistencia a la rotura.

El ácido fúlvico mejora los rendimientos productivos y la calidad de la carne.

El almidón de guisante puede ser utilizado como una fuente alternativa de almidón.

En la actualidad se hacen necesarias nuevas estrategias de suplementación en micronutrientes para los lechones recién nacidos.

Los polifenoles procedentes de extractos de plantas pueden representar aditivos naturales para luchar contra la diarrea post-destete.

La inclusión de lecitina en las dietas de porcino mejora la ternura de la carne y el rendimiento de la canal.

La adición de diferentes fuentes de Se no afectó a las concentraciones de inmunoglobulinas en las primerizas o los lechones.

El aumento de la edad al destete tiene efectos positivos para la salud e incrementa el rendimiento entre el destete y las 10 semanas de edad.

La integridad intestinal, la función intestinal y el metabolismo pueden verse comprometidos debido a un estrés térmico prolongado.

Los resultados mostraron un efecto terapéutico de la valnemulina en cerdos con disentería grave mientras que no se observaron efectos terapéuticos del quelato de zinc.