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En agosto la cotización española se ha dejado 13,50 céntimos por el camino, lo que representa más de un 10% del precio inicial. Realmente es una bajada muy significativa. Las razones de la misma las anticipábamos en nuestro comentario anterior, del que sólo recordaremos literalmente que: "los mataderos y salas enfrentan pérdidas hemorrágicas". Es posible que el precio español estuviera a principios de mes por encima del nivel que le correspondía en el contexto de nuestro mercado (la Unión Europea).
En las últimas semanas han llegado a España cerdos vivos para sacrificio de la vecina Francia en una prueba palpable que el precio español era alto. Este hecho hay que considerarlo anecdótico y sin ninguna solución de continuidad.
La experiencia de cada año nos enseña que pasado el mes de agosto (y la canícula correspondiente) la oferta nacional aumenta y el precio, sistemáticamente, pierde posiciones. Algunos años la bajada en septiembre ha sido espectacular. ¿Ocurrirá lo mismo este año?: muy probablemente no.
Los sacrificios de las últimas semanas han sido muy inferiores a la media normal del año, los balances de los mataderos acumulan cifras negativas en lo que va de ejercicio y, por poco que los resultados económicos lo permitan, las matanzas aumentaran radical y espectacularmente en septiembre.
Aunque persisten las dificultades en algunos productos del despiece (el lomo ha perdido su condición de producto estrella, los jamones para curación no terminan de venderse bien,…) en general el mercado ha despertado y los stocks de carne no son ni importantes ni determinantes.
Nos parece que en septiembre la cotización española seguirá descendiendo pero a un ritmo más comedido y todas las fuentes consultadas por este comentarista coinciden en descartar totalmente un hundimiento significativo -ni ahora ni más delante- del precio. La capacidad de sacrificio instalada en España es de tal magnitud que se puede absorber cualquier punta de oferta, por importante que esta sea. Lentamente pero sin pausa los mataderos en general se han ido modernizando y ampliando su capacidad, la "fotografía" del sector en la actualidad poco tiene que ver con la de hace apenas diez años.
Es probable que una parte significativa de la pesadez del mercado europeo sea debida a la llegada de carne exenta de tasas originaria de países muy competitivos (USA, Chile, Brasil). La OMC preconiza la liberalización del comercio mundial y la UE no puede negarse a conceder determinados cupos de importaciones libres de cualquier exacción. Volveremos en ulteriores comentarios sobre esta cuestión.
Esperemos que el suelo de la cotización del cerdo en nuestro país este próximo.
Cada día sabemos más y entendemos menos (Albert Einstein)
 Guillem Burset |
