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En un estudio danés, las mucosas estomacales de 320 cerdos fueron puntuadas en el matadero en una escala de 0 a 10 según las lesiones gástricas observadas (0= ausencia de alteración; 10= alteraciones severas). Los factores estudiados fueron el cereal (cebada o trigo) el método de trituración (molido o machacado) y la presentación del pienso (granulado o en harina). Los piensos molidos tenían aproximadamente el doble de partículas inferiores a 0,5 mm que los machacados, los tamaños medios de partícula eran respectivamente de 0,5 y 0,88 mm.
Los cerdos que comieron trigo o cebada machacados y en harina no desarrollaron úlceras (puntuación =0,7) en comparación con los cerdos que consumieron cereales molidos y en harina (2,8). La granulación de la cebada machacada apenas incrementó la ulceración (1,3) pero la granulación del trigo machacado incrementó dramáticamente la incidencia de úlceras (4,3). El nivel más alto de ulceración fue observado en las dietas granuladas de trigo molido (4,9).
Estos resultados indican que el tamaño de partícula es mucho más importante que el tipo de cereal. Si la proporción de partículas mayores y menores de 1 mm en el pienso es parecida, prácticamente desaparecen los problemas de úlceras. Otro factor que aumenta la incidencia de lesiones gástricas es la granulación. Además y por lo general, todos aquellos factores que incrementen la consistencia del contenido gástrico serán beneficiosos en la prevención de lesiones gástricas, y sobretodo, se recomienda evitar piensos muy molidos y granulados.
E.K. Nielsen, K.L. Ingvartsen. Livestock Production Science 66 (2000) 271-282
