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La nueva aplicación permite conocer las emisiones contaminantes y el consumo de recursos de una explotación ganadera concreta a lo largo del proceso productivo, teniendo en cuenta las técnicas y procedimientos utilizados en la alimentación de los animales, en el diseño y manejo de los alojamientos y en el almacenamiento y gestión de los estiércoles y purines producidos. En concreto, los ganaderos pueden determinar las emisiones de amoniaco, metano y óxido nitroso de su granja, el purín y estiércol producido, así como su concentración de nitrógeno, añadiendo que también establece la capacidad de almacenamiento de estiércoles en granja y si ésta es acorde con las necesidades para una buena valorización de los mismos. A la vez, permite medir la cantidad de nitrógeno que se está aportando a las tierras de cultivo con los estiércoles y si la dosis es adecuada, analizando la situación medioambiental de las granjas, y señalando los aspectos que se pueden mejorar y las herramientas de que se dispone para ello.
Miércoles, 9 de junio de 2010/ MARM/ España.
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