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Un aislamiento salvaje del virus del PRRS fue inoculado en vectores formados por nieve y agua. Los vectores contaminados fueron fijados bajo un vehículo que recorrió una distancia aproximada de 50 Km hasta llegar a una instalación comercial de lavado de camiones donde las botas del conductor entraron en contacto con los vectores durante la limpieza, introduciendo de esta forma el virus en el interior del vehículo. El vehículo volvió a recorrer unos 50 km hasta llegar a una explotación porcina simulada donde las botas del conductor propagaron de forma mecánica el virus en la antecámara de la explotación. Los envases utilizados normalmente en la explotación (refrigerador de semen, caja de herramientas metálica, contenedor del almuerzo de plástico y caja de cartón) que se encontraban en la antecámara estuvieron en contacto con el líquido procedente de las botas infectadas. Se tomaron muestras del suelo donde se lavó el camión, de las alfombras de la cabina del camión, las suelas de las botas, el suelo de la antecámara y la superficie de los distintos envases para detectar el virus. Se realizaron 10 réplicas junto con testimonios falsos.
Se detectó ácido nucleico del virus en varias de las muestras en 8 de las 10 réplicas. Todos los falsos testimonios fueron negativos.
Los resultados indican la existencia de transmisión mecánica del PRRSV durante una secuencia coordinada de acontecimientos en épocas de bajas temperaturas.
Scott Dee, John Deen, Kurt Rossow, Carrie Wiese, Satoshi Otake, Han Soo Joo, Carlos Pijoan. Mechanical transmission of porcine reproductive and respiratory syndrome virus throughout a coordinated sequence of events during cold weather. The Canadian Veterinary Medical Association. October 2002. Vol. 66. Nº 4.
