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De acuerdo con declaraciones del primer ministro ruso Dmitry Medvedev, a mediados de julio eran ya 55 los casos de peste porcina africana registrados en el país. La situación sigue siendo difícil, incluso en las principales regiones agrícolas y ganaderas.
Durante su intervención, Medvedev recordó los avances realizados durante los últimos años en el sector porcino, y la posibilidad de poder exportar carne de cerdo, cosa que no había sucedido antes ya que Rusia ha sido siempre un país dependiente de las importaciones.
Teniendo en cuenta la existencia de una comisión permanente en el Ministerio de Agricultura que se ocupa de esta cuestión y que, sin embargo, la experiencia ha mostrado que las medidas adoptadas por las autoridades locales y regionales han demostrado ser ineficientes y poco coordinadas, el vice-primer ministro Arkady Dvorkovich, por su parte, propuso durante la reunión prohibir la producción porcina para todas las organizaciones, independientemente del tipo de propiedad, si no cumplen con los requisitos de control biológico. Durante la reunión se barajó también la idea de sustituir el tipo de producción en las pequeñas explotaciones privadas, por otro tipo de ganado o de cultivos. Según Medvedev este es un tema sensible, ya que las pequeñas explotaciones privadas suelen ser a menudo el origen de las infecciones, pero que a su vez proporcionan empleo a un gran número de personas. Asimismo se sugirió la puesta en práctica de un sistema para el seguimiento de los movimientos de animales y productos animales en el país y para la exportación.
Lunes, 22 de julio de 2013/ Government/ Rusia.
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