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En la conferencia participaron 270 personas representantes de 41 países, autoridades internacionales como la FAO y la OMS, organizaciones de médicos, de veterinarios, de la industria farmacéutica y de consumidores.
En esta ocasión, se presentaron las directrices establecidas por un grupo de expertos de la OIE relativas a la vigilancia del consumo de antibióticos, al análisis de riesgos, a los programas de vigilancia de la resistencia, a la normalización de los métodos de laboratorio y al uso prudente de los antibióticos.
Si bien los problemas de salud pública asociados con las bacterias resistentes son debidos, en su mayoría, a la utilización de antibióticos en medicina humana, las transferencias de resistencia entre animales y seres humanos obligan a los diversos profesionales a mejorar el uso responsable de los antibióticos para el ganado. Esto comporta la necesidad de reforzar el diálogo entre veterinarios y médicos.
Durante la Conferencia se destacó también la necesidad de llevar a cabo análisis de riesgo ya que se considera esencial para los programas de vigilancia de las bacterias resistentes y de las cantidades de antibióticos utilizados en la cría de animales. También se alentó a los países a poner en práctica los programas de vigilancia de las bacterias resistentes y con la finalidad de poder comparar y combinar los resultados obtenidos se hace necesario reforzar la harmonización de estos planes así como los métodos de laboratorio cuantitativos normalizados que son utilizados para medir la sensibilidad de las bacterias antibiorresistentes.
Es necesario realizar un uso prudente y responsable de los medicamentos veterinarios. Se ha recomendado que las organizaciones internacionales y los organismos donantes para el desarrollo unan sus esfuerzos para ayudar a los países en vías de desarrollo a cumplir las condiciones necesarias al establecimiento de uso responsable.
Viernes, 5 de octubre de 2001/OIE
http://www.oie.int/esp/press/e_051001.htm
