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Como ya es conocido, la Comisión Europea quiere limitar la duración del transporte de animales a un máximo de 9 horas con una parada obligatoria posterior de 12 horas, tras las cuales el transportista podrá reanudar su viaje. El objetivo de estas reglas es favorecer el bienestar de los animales. El PVV ha calculado que con una duración máxima de 9 horas, dos terceras partes de la exportación de lechones holandeses, lo que supone 2,2 millones de animales, no podrá realizarse. Esto supondrá que 500 de los 5.000 productores de lechones en Holanda deberán abandonar el negocio. Una gran parte de los lechones producidos en el país son exportados, porque en Holanda no hay suficientes posibilidades de venta. Las estrictas reglas supondrían también que una tercera parte de la exportación holandesa de cerdos, unos 430.000, también desaparecería, ya que los animales deberían ser enviados a mataderos más cercanos, lo cual produciría unos beneficios inferiores.
Jueves, 16 de octubre de 2003/MAPA-Noticias Exterior
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