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Ante el riesgo de que eventualmente se produjera un brote de una enfermedad contagiosa en Holanda que paralizara la exportación, cuyas consecuencias serían muy graves, el sector está planteando la creación de un plan de acción para el eventual momento en que algo falle. Se han barajado varias posibilidades, si bien hasta el momento ninguna de ellas parece perfecta.
Una opción sería sacrificar lechones para consumo evitando así la destrucción de animales sanos, pero la capacidad del mercado interior es demasiado pequeña y el precio caería en picado. Otra opción es el sacrificio indoloro y eliminación de lechones como solución rápida y eficiente lo que daría lugar a una recuperación más rápida del mercado si bien comportaría la destrucción de capital y dañaría la imagen del sector. La tercera opción sería vacunar y sacrificar cerdos de cebo para consumo resultando en menores pérdidas de ingresos para el ganadero pero como inconveniente sólo se mantienen las ventas interiores de lechones. Su viabilidad dependería de los mataderos y del comercio, dentro y fuera del país. La última opción sería el saneamiento y cierre de los focos infecciosos, como ventaja la medida no alcanzaría a todos los ganaderos, su viabilidad dependería de las reacciones de los vendedores extranjeros y de la gravedad del brote pero como inconveniente presenta la elevada proximidad de los cerdos, ya que Holanda es prácticamente una única zona sanitaria.
Jueves, 8 de mayo de 2008/ Noticias del Exterior-MAPA/ España.
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