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El 25 de junio de 2002, en esta explotación se administró la vacuna de rutina contra la PPC a un lote de 225 cerdos entre verracos, primerizas, cerdos de engorde, cerdos mayores de 4 meses y animales de entre 2 y 4 meses. Durante los días posteriores se observaron complicaciones en varios animales vacunados (especialmente en los cerdos de entre 2 y 4 meses y de más de 4 meses): anorexia, paso inseguro, vómitos y, en algunos animales, hipertermia hasta los 41-42º C. Se administró antibioterapia a los animales y la situación pareció normalizarse, pero la anorexia persistió. Entre el 1 y 4 de julio murieron varios animales del grupo de lechones de entre 2 y 4 meses y se enviaron repetidas muestras al Centro Nacional de Diagnóstico Veterinario (CNDV). Al principio el examen anatomopatológico de sus cadáveres no reveló ninguna anomalía pero el día 4 de julio y se observaron signos compatibles con la PPC aunque las muestras fueron examinadas por el CNDV y resultaron negativas. A partir del 5 de julio la situación era prácticamente normal, quedaban solamente 12 animales enfermos del grupo de 2 a 4 meses, con retraso de crecimiento manifiesto. Dos de ellos fueron sacrificados y las muestras tomadas de órganos que presentaban lesiones compatibles con la PPC fueron enviadas al CNDV, que diagnosticó la presencia de la enfermedad.
Por el momento se sospecha que el origen de la infección tenga un origen vacunal.
Como medidas de lucha se están aplicando todas las medidas sanitarias y de cuarentena necesarias en la explotación afectada y en la zona de riesgo se está administrando la vacuna al ganado susceptible y se realiza un control veterinario riguroso.
Actualmente la situación es estable, ya no se observa morbilidad ni mortalidad, ni en los animales vacunados ni en los animales no vacunados.
Viernes, 12 de julio de 2002/OIE-Informaciones Sanitarias. Vol. 15 - Nº 28
http://www.oie.int/esp/info/hebdo/e_current.htm
