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Esta entrada no conllevará una entrada de carne de cerdo a bajos precios ya que la mayoría de estas explotaciones son de pequeñas dimensiones y las únicas empresas a gran escala se encuentran en la República Checa, Hungría y Eslovaquia y estos productos ya se encuentran dentro del mercado internacional.
Según los datos, durante los primeros años no existirá una hegemonía de estos países en el mercado europeo del porcino ya que será necesario un periodo de adaptación a los requisitos de la UE. Por ejemplo, en el caso de los mataderos, se necesitaran como mínimo dos años para que estos se adecuen a los estándares europeos. En Polonia, de los 2700 mataderos, sólo 20 responden a los estándares europeos mientras que en Hungría son sólo 17 de los 346 y en Eslovaquia 5 de los 200.
Lunes, 23 de junio de 2003/ISMEA-Newsletter/Italia
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