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Para poder determinar el inicio de la enfermedad clínica o sistémica se utilizaron los datos sobre la ingesta de pienso y el nivel de cortisol respectivamente. El factor-α de necrosis tumoral, interleucina-1β e interferon-γ fueron utilizados como marcadores representativos de la inflamación sistémica.
En el estudio participaron 15 machos castrados de unas 5 semanas de edad que fueron alojados en corrales de 1,5m2 con ambiente controlado (25°C) e iluminación permanente y con acceso a agua y una dieta sin medicar.
Ocho animales fueron inoculados de forma intranasal con 5x108 ufc de Actinobacillus pleuropneumoniae mientras que siete animales (cerdos control) fueron inoculados con una solución estéril. Una semana antes de la exposición se introdujo un catéter venoso a todos los cerdos, tanto los expuestos como los control. Desde las 12 horas antes de la exposición hasta las 72 horas post-inoculación se recogieron muestras de sangre.
En los animales inoculados con Actinobacillus pleuropneumoniae se observó una disminución de la ingesta durante los intervalos estudiados así como un nivel elevado de cortisol a partir de los 180 min y hasta las 18 horas post-inoculación (P < 0.001), 36 h (P < 0.05), 42 h (P < 0.001) y 60 h (P < 0.05) después de la infección. No se observó ningún efecto sobre las citocinas circulantes.
Los resultados de este estudio asocia la infección por Actinobacillus pleuropneumoniae en cerdos jóvenes con síntomas patofisiológicos de la enfermedad, en particular con la falta de apetito y con un aumento prolongado del nivel de cortisol en suero, y que ambos síntomas se dan en ausencia de cambios en las citocinas sistémicas seleccionadas durante las primeras 24 h tras la infección.
R. Balaji, K. J. Wright, J. L. Turner, C. M. Hill, S. S. Dritz, B. Fenwick, J. A. Carroll, M. E. Zannelli, L. A. Beausang, and J. E. Minton. Circulating cortisol, tumor necrosis factor-α interleukin-1β, and interferon-γ in pigs infected with Actinobacillus pleuropneumoniae. J. Anim. Sci. 2002. 80:202-207.
