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En este estudio, 60 cerdos destetados de 4 semanas de vida se alimentaron inicialmente con una dieta basada en proteínas lácteas no medicada. Los cerdos se asignaron de forma aleatoria a seis grupos de tratamiento y se alimentaron con una de las tres dietas siguientes: maíz (M), harina de maíz-soja (MS) y harina de trigo-cebada-soja (TCS). Después de 7 días, los cerdos de cada tratamiento dietético se inocularon con B. pilosicoli y se observó la presencia de signos clínicos, ganancia de peso y el índice de transformación durante 21 días post-exposición. Se analizaron escobillones fecales e intestinales para la presencia de B. pilosicoli semanalmente y durante la necropsia.
Las puntuaciones para diarrea se redujeron en los cerdos infectados y no infectados cada semana en todos los tratamientos. Los cerdos alimentados con la dieta MS tuvieron puntuaciones para diarrea significativamente más altas comparadas con los cerdos alimentados con la dieta M. Los cerdos alimentados con la dieta TCS tuvieron puntuaciones intermedias. A los 21 días post-infección, el índice acumulativo de infección fue del 93%.
Duhamel G.E., Dritz S.S., Holck J.T. / Proceedings, International Pig Veterinary Society Congress (IPVS) 1 : 45, 2000
