Según el National Pork Producers Council, durante los últimos siete meses la crisis ha costado a la industria porcina norteamericana más de 2,1 mil millones de dólares, con unas pérdidas para los productores de 30 a 50 dólares por cerdo durante los últimos 30 días, debido en gran parte al aumento del precio de la alimentación. Varios economistas han estimado que la industria necesitará reducir la producción en como mínimo un 10% o lo que es igual, unas 600.000 madres, para poder volver a obtener beneficios. Sin embargo, está reducción tendrá consecuencias negativas ya que podría dar lugar al cierre de fábricas, a una menor disponibilidad de abonos orgánicos para los campos y en consecuencia a un amento de la necesidad de adquirir fertilizantes inorgánicos producidos en el extranjero, así como un aumento de los precios al por menor de la carne de cerdo debido a la menor oferta.
Jueves, 1 de mayo de 2008/ USDA/Estados Unidos.
http://www.usda.gov
Jueves, 1 de mayo de 2008/ NPPC/ Estados Unidos.
http://www.nppc.org/