Anemia ferropénica del lechón y Forceris TM

La anemia es una afección en la cual el organismo no tiene suficientes glóbulos rojos sanos. Como su nombre indica, la anemia por deficiencia de hierro se debe a la insuficiencia de hierro en la sangre. Sin este elemento esencial, el organismo no puede producir suficiente hemoglobina, sustancia presente en los glóbulos rojos que permite trasladar el oxígeno en el cuerpo.

En el caso del porcino, los lechones nacen con muy pocas reservas corporales de hierro, apenas suficientes para cubrir las necesidades para los 2-3 primeros días de vida. Estos animales presentan un crecimiento muy rápido en las primeras etapas de vida. Además de esto, durante las 2-3 primeras semanas de vida el lechón toma como único alimento el calostro y la leche de la cerda, los cuales son muy pobres en hierro.

La anemia ferropénica cursa con una menor tasa de crecimiento, una disminución de las defensas, dificultad respiratoria y con trastornos digestivos. Los animales afectados pueden presentar palidez de las mucosas (sobre todo a nivel de orejas y hocico), pelo áspero y abundante, orejas y cola colgantes y piel arrugada y blanca.

El diagnóstico laboratorial consiste en el análisis de los niveles de hemoglobina y valores de hematocrito en sangre. La administración de hierro a los lechones es la forma indicada para el control de la anemia ferropénica. El uso más habitual es el profiláctico, que consiste en la administración de hierro a los lechones entre el 2º y 3º día de vida.

Forceris^TM

Forceris^TM es la primera combinación de Toltrazuril y Gleptoferrón para su aplicación inyectable por vía intramuscular en dosis única de 1,5 ml para lechones a partir de las 24 horas de vida.

Forceris^TM está indicado para la prevención de la anemia por deficiencia de hierro (ferropénica) porcina, así como para la prevención de los signos clínicos asociados a la coccidiosis porcina (diarrea), así como para la reducción de la excreción de ooquistes del parásito.