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Veinticuatro granjeros con explotaciones con un promedio de 165 madres participaron en el estudio.
Durante la prueba se dio alimento a las cerdas mientras que el ganadero se acercaba suavemente para tocar su hocico. Si las cerdas no intentaban evitar el contacto con la mano del cuidante se las puntuaba como "0" y se denominaron cerdas "confiadas". Las cerdas que no se acercaron después de 10 segundos recibieron una puntuación "10".
La prueba mostró que la proporción media de cerdas "confiadas" por explotación fue del 69%.
Una vez obtenido este valor las explotaciones fueron dividas en dos grupos: grupo 1, explotaciones con menos del 69% de cerdas "confiadas" y Grupo 2, explotaciones con más del 69%.
En el Grupo 2 se observó una progresión positiva del porcentaje de cerdas "confiadas" desde primerizas hasta cerdas más viejas. En el Grupo 1 ocurrió a la inversa. Además, el Grupo 2 tuvo un número perceptiblemente mayor de lechones destetados por cerda y año, un mayor número de nacidos totales por cerda y año, intervalos entre partos e intervalos destete-cubrición fértil más cortos.
Los resultados muestran que la relación entre los animales y sus cuidantes es un factor fundamental para obtener animales más productivos.
Robert, F; Leneveu, P; Fablet, C; Pommier, P. Relations between the reactions of fear and the productivity in sow. Proceedings, International Pig Veterinary Society Congress (IPVS) 16 : 372,2000.
