Se ha propuesto que el comportamiento de juego es intrínsecamente gratificante para los animales y que induce estados emocionales positivos. El efecto psicofisiológico de las emociones puede evaluarse a través de la variabilidad de la frecuencia cardíaca (VFC), considerada un indicador del equilibrio simpático-vagal.
Objetivo: Este estudio investigó cómo influye el juego sobre la frecuencia cardíaca (FC) y los parámetros de VFC (RMSSD, SDNN) en cerdos. Se planteó la hipótesis de que la VFC aumentaría durante e inmediatamente después del juego debido a la activación vagal predominante en comparación con el valor basal, lo que indica un estado emocional positivo.

Métodos: Se seleccionaron cerdas primerizas (n = 32, 18 y 19 semanas de edad), alojadas en corrales estándar parcialmente emparrillados, procedentes de dos tratamientos de juego: Novedad (NOV) y Corral de Juego (CJ). Las cerdas del tratamiento de juego se criaron con estimulación intermitente del juego (3 veces por semana) a partir de las 10 semanas de edad. Para el registro de la VFC, el juego se promovió durante 15 minutos en parejas de primerizas dentro del tratamiento, con objetos destructibles nuevos proporcionados en el corral (NOV, 1 m2/cerda) o en un área de juego cerrada que proporcionaba un espacio adicional (CJ, 2,9 m2/cerda). La VFC se midió durante una sesión de juego en tres períodos consecutivos: (i) inicio (antes de la sesión de juego, sin juego), (ii) sesión de juego (expresión de juego) y (iii) post-juego (inmediatamente después de la sesión de juego).
Resultados: Veintiséis cerdas jugaron al menos una vez. Los episodios de juego duraron entre 10 y 30 s (10 s: n = 60, 20 s: n = 18, 30 s: n = 6). En los episodios de 10 s, en comparación con el periodo de inicio, la RMSSD fue mayor durante el juego (p = 0,027) y después del juego (p = 0,015), mientras que la SDNN aumentó durante el juego (p ≤ 0,001) y después del juego (p = 0,008) pero solo cuando el animal se desplazaba (cerda avanzando: caminando o corriendo). La FC no difirió entre los periodos, pero fue mayor durante el movimiento (p = 0,003). Los episodios de 20 s siguieron la misma relación, con diferencias únicamente numéricas, mientras que la VFC en los episodios de 30 s no difirió. Los tratamientos no influyeron en la VFC.
Conclusión: Los resultados sugieren que el juego incrementa la variabilidad de la frecuencia cardíaca y este efecto persiste inmediatamente después del juego, lo que indica que el juego contribuye al estado emocional positivo en cerdos. La actividad física relacionada con el juego influye en la variabilidad de la frecuencia cardíaca. Un juego más dinámico y enérgico que incluya movimiento podría ser más gratificante para los cerdos. Este estudio proporciona evidencia para evaluar las emociones positivas en los cerdos y subraya la importancia de incorporar experiencias gratificantes en las prácticas ganaderas convencionales.
Steinerová K, Krause A, Parker SE and Seddon YM (2025) Exploring the effect of play on heart rate variability as a measure of positive emotional states in pigs. Front. Vet. Sci. 12:1518153. doi: 10.3389/fvets.2025.1518153