13 de noviembre de 2025 | IFEEDER | Estados Unidos | https://www.ifeeder.org
02-dic-2025 (hoy)El Instituto para la Educación e Investigación de Alimentos Balanceados (IFEEDER), en colaboración con Decision Innovation Solutions y Lobo Consulting Solutions, realizó un estudio exhaustivo para evaluar las cadenas de suministro de vitaminas y aminoácidos y cómo las posibles interrupciones en el suministro podrían afectar la producción ganadera y avícola estadounidense. Los hallazgos indican que el acceso constante a estos nutrientes clave es vital para la producción animal y la seguridad alimentaria en Estados Unidos.
Estados Unidos tiene una producción nacional limitada de aminoácidos, que representa menos del 20 % de la capacidad mundial, y casi ninguna producción de vitaminas, excepto la niacina (B3), que representa solo el 7 % de la producción mundial. Como resultado, la industria de alimentos balanceados de Estados Unidos depende en gran medida de las importaciones, en particular de China, que suministra una parte significativa de aminoácidos y vitaminas suplementarios. Por ejemplo, el 100 % de la lisina importada incluida en los alimentos para ganado y aves de corral proviene de China. Las importaciones de vitaminas dependen en gran medida de China, especialmente para la tiamina (B1), el ácido pantoténico (B5), la piridoxina (B6) y la vitamina E, donde las fuentes chinas representan más del 80 % de las importaciones totales. Esta fuerte dependencia de las importaciones de un número limitado de fuentes resalta la vulnerabilidad de la producción de alimentos para animales de Estados Unidos a las interrupciones de la cadena de suministro global.
Si se producen interrupciones en la cadena de suministro, las modificaciones de la dieta podrían compensar la necesidad de algunos nutrientes suplementarios. En el caso de los porcinos, la reformulación de las dietas para compensar la suplementación restringida fue parcialmente viable utilizando ingredientes alternativos (p. ej., harina de alfalfa, harina de soya, DDGS y harina de pescado). Sin embargo, estos ajustes incrementaron los costos del alimento y, en algunos casos, especialmente en el caso de las vitaminas B y D, ninguna formulación práctica podía cumplir con los estándares nutricionales de la industria sin la suplementación de vitaminas.
El informe concluye que la producción de alimentos balanceados y ganado en Estados Unidos depende en gran medida de las vitaminas y aminoácidos importados, la mayoría de los cuales provienen de China. Esta dependencia plantea riesgos tanto para la estabilidad de la cadena de suministro como para la seguridad alimentaria nacional. Una interrupción en las importaciones podría perjudicar la producción nacional de ganado y aves de corral, a la vez que aumenta los costos de producción y de los alimentos.