Situación de la castración de cerdos en la Unión Europea

IFIP Institut du porc
31-ene-2022 (hace 2 años 2 meses 28 días)

Desde enero de 2022, Francia prohíbe la castración quirúrgica de lechones machos sin tratamiento del dolor, es decir, sin anestesia. La producción de cerdos machos enteros o la inmunocastración (castración química) son alternativas a la castración bajo anestesia. Entre los países productores europeos, la elección de la alternativa difiere según el contexto de cría y los métodos de pago de los cerdos.

Sin ser impuesta por la Comisión Europea, la nueva legislación francesa sigue la línea de otros países europeos en un contexto de fuerte presión social. El objetivo es mejorar el bienestar animal. La castración de lechones de una semana de vida se lleva a cabo para evitar el desarrollo de un olor desagradable en la carne de cerdo y productos derivados. En la madurez sexual de los machos, alrededor de los 180 días de vida, se desarrolla la producción de las hormonas escatol y androsterona, responsables del olor desagradable (olor sexual) al ingerir carne y productos derivados del cerdo.

Una respuesta a este problema es la cría de machos enteros, los cuales presentan un mayor rendimiento, generando menos costos pero con ciertos ajustes en relación al manejo. Las canales con olor sexual deben detectarse en el matadero. En el caso concreto de Francia se utiliza la nariz humana. Sin embargo, las empresas cárnicas se muestran reacias a aceptar carne de cerdos machos enteros debido por un lado al riesgo de olor sexual y por otro a la producción de carne más magra, con consecuencias sobre la calidad de los productos derivados que requieren grasa.

En la Unión Europea, la castración (en vivo, bajo analgesia o anestesia o por inmunocastración) sigue siendo dominante con aproximadamente el 31,5 % de los 258 millones de cerdos sacrificados en 2020. La producción de machos enteros se estima en 45 millones de cerdos, es decir, el 17 % del sacrificio. La inmunocastración representa aproximadamente el 1% de los sacrificios de la UE. Las organizaciones o empresas han definido sus reglas según la valoración de los cerdos castrados o no castrados, que influyen en el pago a los productores. Aquí mostramos algunos ejemplos en la UE:

Durante los últimos diez años, en Europa, el número de machos enteros ha ido aumentando gradualmente. En la mayoría de los países, este desarrollo se topa con una saturación del mercado nacional y las empresas tienen dificultades para exportar esta carne. La presión social sugiere que la producción de cerdos machos enteros seguirá desarrollándose. Los contratos entre productores y mataderos serán esenciales.

Répartition des abattages mâles selon mâles entiers, castrés ou immunocastrés.

Jan-Peter van Ferneij, économiste à l’IFIP .