RGT da Cunha. As good as it sounds: understanding piggish. 2006. PigProgress: 22(13-15)
15-feb-2007 (hace 17 años 3 meses 4 días)La Universidad de Campinas está llevando a cabo un estudio sobre vocalizaciones
en cerdos, que pretende obtener indicadores de estrés animal y/o condiciones
de alojamiento.
El
estudio se realizó sobre seis cerdas similares y sus camadas. Empezó
tras la homogenización de lotes y antes del contacto con las cerdas. Utilizando
un micrófono direccional se registraron los sonidos mientras se anotaba
el comportamiento de los animales. Las vocalizaciones se analizaron con un programa
que describía sus parámetros físicos (amplitud, frecuencia,
etc.) en un intento de diferenciarlos.
Se distinguieron cuatro sonidos, dos de las hembras (“llamada a comer”:
emitido hasta que el último lechón no llegaba a su pezón
y “emisión de leche”, que duraba unos 15 segundos y empezaba
cuando todos los lechones estaban preparados) y dos de los lechones (“miedo”:
producido durante la manipulación y antes del contacto con la madre y
“hambre”, emitido justo después del contacto con la hembra).
De momento los estudios con múltiples animales a la vez no han tenido
mucho éxito, pero los científicos creen que un ambiente excesivamente
ruidoso puede estar relacionado con niveles de sordera de las madres. Esto explicaría
porqué algunas cerdas viejas no responden adecuadamente a las llamadas
de miedo y dolor de sus lechones, por lo que hay más aplastamientos (simplemente
no les oirían).