Evaluación de tres técnicas serológicas de detección de triquinelosis

S.M. Venturiello, G.G. Nuñez, M.A. Calcagno, S.N. Costantino. Evaluation of three immunoserological techniques in the detection of porcine trichinellosis. Veterinary Parasitology. 2009. Vol. 159 (3-4): 364-367.

06-mar-2009 (hace 15 años 2 meses 12 días)
El presente estudio tuvo como objetivo comparar tres técnicas inmunoserológicas utilizados en la detección de triquinela en cerdos. Los tests estudiados fueron: inmunofluorescencia (IF), enzimoinmunoanálisis (EIA) y Western Blot (WB). Durante las investigaciones se utilizaron 3 grupos de animales: animales infectados de forma natural con una carga parasitaria (CP) de < 1 larva muscular/g (grupo 1, n=18); CP ≥2 ML/g (Grupo 2, n=23) o animales criados y sacrificados en la misma explotación en explotaciones argentinas (n=59).

Los porcentajes de detección en suero de los animales con baja CP fueron del 100% mediante IF y del 72% y 50% mediante EIA y WB, respectivamente. En el caso de los cerdos con una elevada CP, el porcentaje de detección fue del 100% mediante IF y del 91% mediante EIA mientras que fue menor en el caso del WB (61%). Un 83% de los animales, en el caso de los cerdos con baja CP, y un 96% de los animales, en el caso de los cerdos con elevada CP fueron serológicamente positivos para dos de las tres técnicas. En el caso de los animales del grupo 3, los porcentajes de detección fueron menores y similares para las tres técnicas utilizadas: 30% para IF, 29% para EIA y 42% para WB, con un 25% de los animales positivos para dos de las tres técnicas.

Los resultados muestran que la sensibilidad de cada técnica depende de la carga parasitaria pero se observa siempre como la sensibilidad de la IF es mayor que la de la EIA y estas a la vez son mayores que la de WB y, si bien para esta última técnica la sensibilidad es muy baja, la detección de bandas específicas para Trichinella spiralis la hace una herramienta de confirmación útil. Por otro lado, teniendo en cuenta los resultados obtenidos, aquellos animales que han dado positivo a 2 o 3 de las técnicas pueden considerarse como realmente infectados.