Alimentación líquida fermentada para porcino

Así lo ve Imasde

27-oct-2004 (hace 19 años 5 meses 22 días)
El uso de la alimentación líquida en porcino se encuentra muy extendida en la mayoría de países europeos, como Francia, Inglaterra, Holanda, Alemania y Dinamarca, permitiendo la utilización de co-productos líquidos de la industria alimentaria con el consiguiente ahorro en el coste de alimentación. Gracias a este alto grado de implementación, al progreso técnico y a la búsqueda de alternativas a una alimentación más sana, actualmente se está investigando en el desarrollo de la alimentación líquida fermentada (ALF).

El sistema se basa en la preparación de la dieta líquida la cual se deja fermentar con la consiguiente acidificación por la transformación de los carbohidratos en ácidos orgánicos y la proliferación de una flora principalmente láctica. Para obtener una buena dieta fermentada en un estado estable (steady state), con una flora predominantemente láctica y un pH inferior a 4,5, son cruciales los siguientes aspectos: Debido a la fermentación, hay una modificación de la composición química del alimento, con una drástica reducción de los azucares de bajo peso molecular y de la lisina libre. Con el fin de evitar esta pérdida de lisina y otros nutrientes no deseada puede fermentarse únicamente la porción de la dieta correspondiente a los cereales y co-productos líquidos ricos en carbohidratos. Posteriormente se incorporan estos ingredientes fermentados en el tanque de mezcla con el resto de ingredientes de la dieta.

Las principales ventajas de este sistema de alimentación son: Hasta la fecha, hay pocos estudios consistentes en cuanto a los rendimientos productivos de este sistema de alimentación. De la síntesis de diferentes estudios experimentales y de campo, se puede considerar que los resultados productivos son iguales o peores que los obtenidos con alimento seco o líquido no fermentado. Sin embargo, hay estudios que han obtenido mejoras productivas importantes en lechones, las cuales pueden ser atribuidas a una mayor salud intestinal de los animales.

Por tanto, se puede considerar al sistema de ALF como una alternativa muy interesante en cuanto a la sanidad de los animales y seguridad alimentaria de los sistemas de alimentación. Sin embargo , hay que tener presentes que la inversión y complejidad del sistema es mayor, y que pueden empeorarse los resultados productivos, sobretodo si el proceso de fermentación no es adecuado y estable.