Retirada de la medicación en el pienso: qué impacto tiene y a qué lechones afecta más

Laia BlaviDavid Solà-Oriol
20-ago-2015 (hace 8 años 8 meses 15 días)

Desde la prohibición del uso de antibióticos como promotores de crecimiento por parte de la Unión Europea el 1 de enero de 2006 (EC 1881/2003), el sector porcino ha ido buscando alternativas para paliar la caída productiva post destete. La mayoría de productores han encontrado en el ZnO el refugio para no pagar el peaje productivo y de pérdida de animales en transición.

Sin embargo, dietas con altos niveles de zinc (2.000 mg/kg ZnO) administradas durante más de 10 días provocan una alta concentración de Zn en el purín. La acumulación en la parte superior del suelo (0-20 cm) puede promover alteraciones del ecosistema cuando este purín es utilizado como enmienda. Por otra parte, estudios recientes han alarmado del posible desarrollo de resistencia antimicrobiana (ampicilina y tetraciclina) asociado a la utilización de Zn a altas dosis (Hölzel y col., 2012; Bednorz y col., 2013).

Por ahora la UE recomienda no sobrepasar de los 2,5 kg Zn/Tm de pienso cuando el ZnO es utilizado como terapéutico durante los primeros 14 días post-destete y siempre bajo prescripción veterinaria. Pero las tendencias apuntan a que dentro de unos años la UE pueda restringir más su uso o llegar a prohibirlo, y ya hay algunos países de la EU, como Holanda y Francia, en los que su uso está prohibido.

Esto hace que el sector porcino se pregunte qué efectos y costes tendrá la prohibición o reducción del ZnO en las dietas post-destete y qué estrategias nutricionales existen.

Para ello realizamos un estudio con el objetivo de evaluar una posible estrategia a la prohibición del ZnO y sus efectos sobre los rendimientos productivos y la mortalidad en la transición. Así se comparó:

  1. La estrategia actual ZnO, Ab y niveles altos de proteína, dieta Medicada (M) (2.480 ppm Zn como ZnO, 120 ppm colistina, 300 ppm amoxicilina, 2.627 Mcal/kg NE, 20,2%PB, 1,37% Lys total).
  2. Una futura estrategia, dieta sin ZnO ni Ab, con bajos niveles de proteína (cumpliendo perfil ideal de AA), reduciendo la capacidad tampón (reducción carbonato cálcico) durante los primeros 14 días post-destete y con inclusión de ingredientes altamente digestibles, que sean palatables y que con baja capacidad tampón (como el suero y el plasma animal), dieta NO Medicada (Ø) (2.531 Mcal/kg NE, 16,5% PB y 1,20% Lys).

¿Porqué decidimos aplicar estas medidas en la dieta NO medicada?

Qué fuentes de proteína altamente digestibles podemos utilizar:

El estudio se realizó en una granja comercial, con un total de 400 animales. Se registró el consumo de pienso durante todo el periodo de transición (0-35 días), se pesaron individualmente todos los animales a día 0 (destete), a 14 y 35 días post-destete. También se anotó la mortalidad por fases, pre-starter (0-14 d) y starter (14-25 d) y del global de la transición. A la entrada en el engorde (35 d post-destete), se ofreció la misma dieta comercial para todos los animales y se pesaron cada 3 semanas hasta la entrada al matadero.

No se observaron diferencias en el peso, ganancia o retraso en la llegada a peso de sacrificio (105 kg) de los animales entre las dos estrategias (figura 1). Sí se observó, no obstante, que los animales sin medicación (Ø) consumieron más que los medicados (M) y por consiguiente obtuvieron un peor índice de conversión durante la transición (tabla 1).

Evolución del Peso Vivo des del destete hasta al sacrificio
Figura 1. Evolución del Peso Vivo des del destete (día 0) hasta al sacrificio (día 151).

Tabla 1. Rendimientos productivos (PV: peso vivo, GMD: ganancia media diaria, CMD: consumo medio diario
e IC: índice de conversión) durante la transición (0 a 35 días post-destete).

  Estrategia Error Estándar P-valor
Sin medicación (Ø) Con medicación (M)
PV0, kg 7,1 7,2 0,16 0,753
PV14, kg 9,4 9,0 0,22 0,161
PV35, kg 18,6 18,5 0,49 0,818
GMD 0-35 g/d 318,9 322,4 11,03 0,800
CMD 0-35 g/d 535,1 447,0 14,04 <,0001
IC 0-35 1,690 1,379 0,03 <,0001

 

Donde se observó más diferencia fue en la mortalidad y sobretodo en la fase pre-starter, donde se obtuvo una diferencia de 7 puntos entre los animales sin medicación respecto los medicados (12% vs 5%, respectivamente). Para saber a qué categoría de animales afectó más la mortalidad, dividimos por percentiles de peso vivo inicial (destete) la mortalidad a día 14. En la figura 2, podemos observar que la mayoría de los animales que mueren son los pequeños y con mayor proporción los animales sin medicación en la dieta. A partir de los 14 días no se encontraron diferencias en mortalidad.

 

Mortalidad a los 14 días post-destete distribuida por percentiles

Figura 2.Mortalidad a los 14 días post-destete distribuida por percentiles,
el número entre paréntesis es la media de peso vivo inicial (kg).

Podemos concluir que los animales con mayor riesgo son aquellos con un menor peso (y seguramente menor edad) y aunque se les ofrezca una dieta baja en proteína, con baja capacidad tampón y con ingredientes altamente digestibles y palatables, no es suficiente para prevenir la diarrea post-destete y sus consecuencias, posiblemente debido a que estos animales no comen lo que les tocaría y sin llegar a cubrir sus necesidades. Por eso, podemos anticipar que con la retirada completa de los terapéuticos, la mortalidad incrementará y los índices productivos empeorarán, hecho que nos obligará a mejorar el manejo (por ejemplo, tratar por separado los animales más pequeños) y seguir buscando nuevas estrategias para alcanzar los niveles productivos estándar actuales.