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Las asociaciones proteccionistas europeas a favor del uso de Improvac®

Las principales asociaciones europeas de defensa del bienestar de los animales, como Eurogroup for Animals Welfare y la Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals (RSPCA)-, han manifestado su conformidad con el empleo de Improvac, la vacuna de Pfizer frente el olor sexual en la carne de cerdo, como mejor alternativa a la castración física de los animales. Según los datos que maneja Eurogroup, en Europa se castran anualmente alrededor de 100 millones de cerdos machos, “la mayoría d...
5 octubre 2010
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Las principales asociaciones europeas de defensa del bienestar de los animales, como Eurogroup for Animals Welfare y la Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals (RSPCA)-, han manifestado su conformidad con el empleo de Improvac, la vacuna de Pfizer frente el olor sexual en la carne de cerdo, como mejor alternativa a la castración física de los animales.

Según los datos que maneja Eurogroup, en Europa se castran anualmente alrededor de 100 millones de cerdos machos, “la mayoría de veces –afirman- mediante técnicas quirúrgicas sin anestesia, lo que genera dolor y estrés a los animales”. Además dicha asociación reconoce que el manejo de animales enteros incrementa el riesgo de lesiones debido a las agresiones durante el intento de monta por parte de los machos sexualmente dominantes.

En este sentido, Eurogroup por Animals Welfare ha hecho público un Documento de posicionamiento sobre la castración de lechones, en el que afirma que “la inmunocastración con Improvac® es una buena alternativa, máxime cuando es previsible que se prohíba la castración quirúrgica de los animales en toda Europa”.

Los proteccionistas europeos abogan porque aquellos países en los que se penaliza la presencia de testículos en el precio de la canal establezcan los mecanismos necesarios para cesar en esta práctica, ya que genera desigualdades entre productores. Además consideran necesario poner en marcha campañas de información al consumidor para dar a conocer el modo de acción de Improvac® y explicarles que, lejos de ser un tratamiento hormonal, se trata de una vacuna y que, por tanto, su empleo no genera residuos en la carne del animal.

Hasta la fecha más de 9 millones de cerdos han sido vacunados con Improvac®, lo que pone de manifiesto la confianza en la vacuna por parte de los productores y la satisfacción de los consumidores con el producto final.